Cuando ganamos unos kilos de más, nuestro cuerpo nos delata. Y entre las partes donde más se ve el aumento de peso destaca el cuello, principalmente la papada. Actualmente, podemos encontrar muchos videos donde nos invitan a hacer ejercicios para eliminar la grasa de la papada, pero… ¿realmente son efectivos? A continuación, te contaremos.
La papada, doble mentón o cuello de ganso consiste en un exceso de grasa debajo del mentón y la mandíbula, aumentando el volumen del cuello. Esta acumulación excesiva de tejido adiposo provoca que se borre el ángulo cervicofacial, es decir, la línea que separa el óvalo facial del cuello.
La papada es un exceso de grasa submental, la cual se encuentra debajo de la piel y sobre el músculo platisma, que baja desde el labio inferior hacia la clavícula. Bajo ese músculo se encuentra un paquete de grasa llamado subplatismal, y que se encuentra contenida entre dos músculos digástricos, los cuales unen al mentón con el hueso hioides.
Todas estas estructuras son las responsables del contorno del cuello, por lo que su tamaño y posición determinan que el cuello luzca más o menos definido.
Lamentablemente, la acumulación de grasa en la papada no se combate solo con ejercicios, al igual que los cúmulos de grasa en otras partes del cuerpo.
Evidentemente, la mala postura de la cabeza puede provocar que la grasa del cuello sea más evidente, y los ejercicios ayudan a fortalecer los músculos
Sin embargo, la forma más realista para eliminar la grasa de la papada es contar con un tratamiento para bajar de peso de forma saludable y hacer ejercicio de forma generalizada para activar la circulación corporal global, oxigenar todos los tejidos y evitar que se formen depósitos de grasa que se acumulen en lugares como la papada.
Las asanas o posturas de yoga permiten trabajar todo el cuerpo mediante estiramientos que ayudan a relajar la tensión muscular, incluyendo la de los músculos del cuello. Las flexiones con la cara mirando hacia el frente, el tronco hacia delante y la cara hacia arriba mejoran el riego sanguíneo y la tonificación del cuello, con lo que se puede tener una apariencia más estilizada. Esto último, si se combina con la alimentación saludable.
Si la papada tiene demasiada grasa acumulada o flacidez pronunciada, otras alternativas como la radiofrecuencia facial son recomendables para estimular la producción de colágeno y elastina que rejuvenecen la piel del cuello.
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