¿Eres de esas personas que asocia mentalmente hacer ejercicio con dolor y sufrimiento? No todos sentimos esa pasión por ejercitarnos, ni tenemos la disciplina para levantarnos temprano y salir a correr o ir al gimnasio antes (o después) de realizar nuestras actividades cotidianas.
Hoy tenemos una buena noticia para ti: la motivación y la fuerza de voluntad pueden ser adquiridas con unas acciones sencillas, que te ayudarán a ejercitarte casi sin darte cuenta. ¡No te las pierdas!
Nadie ha dicho que forzosamente debes salir a correr a las 6 a.m., o que debes pagar una membresía en el gimnasio. Si te gusta nadar, disfrutas de caminatas por la tarde, o sientes una pasión desmedida por bailar, déjala fluir y notarás la diferencia. Date un tiempo para ti y únete a ese club de futbol, o anótate en clases de salsa y realmente te divertirás mientras te ejercitas.
Cuando disfrutas el deporte, tu cerebro segregará dopamina y se centrará en el placer del ejercicio, por lo que apenas sentirás fatiga y tendrás un mejor descanso y calidad de vida.
La música tiene una cualidad muy peculiar en la estimulación del cerebro y la puedes usar a tu favor. Ponte tus audífonos, súbele a tu Alexa y dale con todo al ejercicio que elijas. Si no sabes cómo empezar, puedes hacer estiramientos, dar caminatas de 15 minutos e ir subiendo la intensidad o añadir más tiempo, o puedes llenar unas botellas de agua para levantarlas a modo de mancuernas. La intención es poner energía y disfrutar de la actividad mientras escuchas tu música favorita.
La visualización es un arma muy poderosa para alcanzar lo que realmente deseas. Cierra tus ojos e imagínate practicando una actividad que te guste, y ponla en acción. Esta estrategia te ayudará a que tu cerebro asocie el movimiento y el deporte con el placer.
Este consejo puede parecerte extraño, pero la realidad es que la falta de outfits es uno de los pretextos para no hacer deporte. Elige pants o shorts cómodos, un par de tenis, sudaderas… toda la ropa que te haga sentir bien cuando te veas al espejo, y que te dé ánimo para salir a lucirla mientras te ejercitas.
Hacer ejercicio no es un sacrificio, es una manifestación de amor propio que harás para verte y sentirte bien. Consentirte no es premiarte comiendo una dona, o con una noche de alcohol y excesos. Tómate un día en el spa, regálate una depilación láser, o escápate a la playa de fin de semana y luce los resultados de tu entrenamiento.
En Body Sanctuary queremos ayudarte a alcanzar tus metas de un cuerpo más sano y tonificado con tratamientos estéticos como presoterapia, drenaje linfático, HIFU corporal, EMSCULPT, entre otros que te encantarán. Agenda tu cita a través de nuestro formulario de contacto y enamórate de los tratamientos que tenemos para ti.
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